
Publicado por Karina Orzechovski en el 2020-07-06
La Depresión se caracteriza por un estado de ánimo negativo acompañado con una pérdida generalizada del interés y la capacidad de experimentar placer (anhedonia). Otros síntomas pueden también aparecer, como trastornos del sueño (insomnio o hipersomnia), aumento o descenso de peso, cansancio, dificultades para concentrarse, sentimientos de culpabilidad, vacío e inutilidad, ideas recurrentes de ruina y muerte.
La Depresión se caracteriza por un estado de ánimo negativo acompañado con una pérdida generalizada del interés y la capacidad de experimentar placer (anhedonia). Otros síntomas pueden también aparecer, como trastornos del sueño (insomnio o hipersomnia), aumento o descenso de peso, cansancio, dificultades para concentrarse, sentimientos de culpabilidad, vacío e inutilidad, ideas recurrentes de ruina y muerte.
Puede presentarse en una variedad de intensidad y duración; pero en todos los casos genera un importante nivel de sufrimiento y dificultad para quien la padece. El paciente depresivo puede presentar problemas en su trabajo, sus estudios, relaciones familiares, etc.
Se define en general por sus síntomas que pueden parecer enfermedades somáticas (dolores, cansancio, etc.)
La clasificación más clásica distingue tres clases de síntomas: Cognitivos, Afectivos o Conductuales.
En la Depresión se presenta lo que llamamos Tríada Depresiva, en que el paciente presenta pensamientos negativos acerca del yo, el mundo y el futuro.
Se distinguen diversas formas de depresión en función de su gravedad, duración, síntomas, etc., desde el episodio depresivo agudo hasta los trastornos distímicos que tienen más que ver con trastornos de personalidad.
El tratamiento utiliza técnicas cognitivas y conductuales. En las primeras fases del tratamiento se suelen emplear técnicas conductuales a fin de acercarse al nivel de funcionamiento que tenía el paciente antes de la depresión. Conseguido esto se van utilizando un mayor número de técnicas cognitivas que requieren un razonamiento abstracto y que van a servir como acceso a la organización cognitiva del paciente, para buscar distorsiones cognitivas base en los pensamientos negativos y automáticos.
Entre las técnicas conductuales podemos reseñar: la programación de actividades y asignación de tareas graduales, la práctica cognitiva y el entrenamiento asertivo. En las técnicas cognitivas destacamos en entrenamiento en observación y registro de cogniciones, demostrar al paciente la relación entre cognición, afecto y conducta, etc